Aunque ayer empezó oficialmente mi rotatorio en Maternidad fue más bien un día de presentación, para orientarnos un poco por la planta, ver donde estaban las cosas, conocer a las pacientes y sus hijos.
Pero lo de hoy no tiene palabras, he estado en una cesárea y ha sido increíble, ver nacer a un niño (en este caso niña) ver como sale del vientre de su madre, se pone a llorar, y en ese momento es donde ha entrado en juego nuestro trabajo, le hemos limpiado, espabilado y la presentación a la mami y al papi, a mi se me saltaban las lágrimas de la emoción al ver al padre conociendo al bebé.
Hoy me voy con una sonrisa a la cama porque ha sido un gran día, espero que mañana lo sea más y mejor :-D
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