Como en la cura de cualquier adicción, ahora estoy pasando por mi periodo de abstinencia. Y como dice el refrán un clavo saca a otro clavo, pero no todos los clavos valen, será cuestión de dar con el apropiado, pero a la mayoría les pasa que les falta ese algo.
Pero luego es curioso que en los días en los que me siento mal conmigo mismo, porque no me encuentro bien, o porque siento que no le importo a nadie corro desesperado a esas 3/4 partes que no llegan a mitad de naranja a esconderme en sus brazos, a buscar la felicidad que me falta, para luego despertar y ver que no era tan infeliz como creía, porque estando junto a esas personas si que me siento infeliz.
La conclusión es fácil, no te vayas con aquellos que no tienen ese puntillo, pero mi pregunta es más complicada, hay más gente especial??
1 comentario:
Esa gente es como las meigas... que nadie las ve, pero haberlas haylas.
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