Es de noche y el frío empiezo empieza a dejarse notar en la casa mientras él, ajeno a lo que sucede a su alrededor está tirado en su cama mirando el techo, de fondo se oye un motete de bach repitiéndose como un lamento sordo en medio de la noche.
El día había sido como otro cualquiera, a las 10.00 sonó el despertador y con él empezó la jornada toda meticulosamente calculada, primero se ducha, se viste, come algo y se va a trabajar hasta que llegan las 22.00 y vuelve a su casa para cenar, leer un rato e irse a la cama. Pero entonces el móvil vibra y resulta ser Js el por ahora sin definir, nuestro amigo se ilusiona cuando oye la llamada y enseguida el mismo tono de voz monótono y plano que había mantenido todo el día para hablar con los clientes cambia a un registro mucho más alegre y dinámico, él le gusta pero Js no sabe nada o al menos eso cree él.
Se conocen desde hace casi un mes, y han ido quedando varias veces por semana para tomar algo, cenar, ir juntos de compras, el sábado Js le invitó a él a comer en su casa pero debido al trabajo, él se tuvo que ir pitando y aun así llegó tarde, pero a él no le importó porque se sentía feliz...pero desde entonces no para de pensar en que esta "pseudo relación" no va a salir adelante, ya que él no tiene nada más que él mismo para ofrecer, y encima su autoestima no le permite confiar más allá del camino que siempre le han marcado, pero él sigue esperando en el móvil una llamada, o un mensaje que le confirme que Js se sigue interesando por él (de una manera o de otra) y que no es obligación o rutina lo que le obliga a contestar...
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